Básicamente, hay un colapso en el stock global de máscaras faciales o barbijos debido a la pandemia que sufre el mundo en la actualidad, y seguramente será así en las siguientes semanas y meses, ¿Qué pasaría si pudieras imprimir en 3d tus propias mascaras faciales?
Para una buena parte de la población, las impresoras 3D hasta hace unas semanas eran unas completas desconocidas. En este breve lapso de tiempo, tras las numerosas noticias aparecidas en los medios de comunicación, este tipo de fabricación de objetos tridimensionales está registrando un inesperado boom.
Es por este motivo que el fabricante chileno de materiales, Copper3D, acaba de lanzar un archivo STL de código abierto para una máscara N95 imprimible en 3D. El objetivo de esta iniciativa, llamada Hack the Pandemic, es movilizar a los fabricantes y los servicios de impresión para que estos respiradores estén disponibles rápidamente a fin de abordar la falta de máscaras N95 (o FFP2) en el mundo y facilitar el trabajo de los profesionales de la salud.
Copper3D afirma que su máscara impresa en 3D NanoHack es antimicrobiana, antiviral, reutilizable y reciclable, y agrega que las máscaras quirúrgicas de un solo uso y los respiradores N95 tendrán un efecto perjudicial en el ecosistema.
La impresión 3D ha evolucionado en muchos aspectos en los últimos años. Su rol, durante la pandemia, está siendo clave. La red solidaria y colaborativa de empresas y particulares que imprimen con este método permitiría salvar vidas.
Sin duda una impresora 3D es el electrodoméstico del futuro.
Básicamente, hay un colapso en el stock global de máscaras faciales o barbijos debido a la pandemia que sufre el mundo en la actualidad, y seguramente será así en las siguientes semanas y meses, ¿Qué pasaría si pudieras imprimir en 3d tus propias mascaras faciales?
Para una buena parte de la población, las impresoras 3D hasta hace unas semanas eran unas completas desconocidas. En este breve lapso de tiempo, tras las numerosas noticias aparecidas en los medios de comunicación, este tipo de fabricación de objetos tridimensionales está registrando un inesperado boom.
Es por este motivo que el fabricante chileno de materiales, Copper3D, acaba de lanzar un archivo STL de código abierto para una máscara N95 imprimible en 3D. El objetivo de esta iniciativa, llamada Hack the Pandemic, es movilizar a los fabricantes y los servicios de impresión para que estos respiradores estén disponibles rápidamente a fin de abordar la falta de máscaras N95 (o FFP2) en el mundo y facilitar el trabajo de los profesionales de la salud.
Copper3D afirma que su máscara impresa en 3D NanoHack es antimicrobiana, antiviral, reutilizable y reciclable, y agrega que las máscaras quirúrgicas de un solo uso y los respiradores N95 tendrán un efecto perjudicial en el ecosistema.
La impresión 3D ha evolucionado en muchos aspectos en los últimos años. Su rol, durante la pandemia, está siendo clave. La red solidaria y colaborativa de empresas y particulares que imprimen con este método permitiría salvar vidas.
Sin duda una impresora 3D es el electrodoméstico del futuro.